Sebastián Gabriel Formento, profesor de Filosofía y vecino de Mar de las Pampas es vegano hace 14 años. En el Día Mundial del Veganismo conversó con Periodismo en Movimiento sobre lo que significa esta elección de vida que aumenta cada vez más en todo el planeta.
Cuánto hace que sos vegano, cómo y por qué hiciste ese cambio en tu alimentación?
– Soy vegano desde 2009. No es un mero cambio en la alimentación. y eso transciende la alimentación ya que implica no solo dejar de comer animales o productos de origen animal sino dejar de explotarlos o de demandar productos de su explotación ( no solo el rechazo a la idea de animales como comida, sino a la idea de animales como vestimenta o como seres que podemos utilizar como herramientas de trabajo, elementos de diversión, etc) ¿Cómo y por qué? Porque si la idea de derechos de los animales tiene algún sentido eso implica que no podemos usarlos como medios para nuestros fines. La idea de derechos de los animales sin veganismo es tan absurda como lo sería la idea de derechos humanos con esclavitud (no tendría ningún sentido en absoluto).
Cuáles son los alimentos pilares de tu alimentación?
– Frutas, verduras, granos arroz, pastas, hongos, semillas, algas, etc. Básicamente todo lo que encontramos en la verdulería. No se requiere de una tienda especializada para adquirir comida vegana aunque como productos típicos de esos lugares el tofu o el seitan suelen ser los favoritos para mí. Mucho de lo que la gente come está enumerado en esa lista que di. Simplemente se trata de comer más de ello y eliminar lo que contenga productos de origen animal. La postura de la Asociación Americana de Dietética es muy clara al respecto: las dietas veganas bien planificadas son aptas para cualquier estadío de la vida. Ser vegano es muy fácil, lo soy en Mar de las Pampas teniendo a la mano no mucho más que un pequeño almacén.
Te cuesta no consumir carnes?
– No en absoluto. Y por esta razón: por la misma razón en que no me cuesta limitarme en algo que perjudica a otros. No se trata de mi, se trata de los animales, se trata de los derechos fundamentales de los animales por lo tanto ni siquiera se me ocurre plantearlo en términos de lo que me cuesta. Lo que sí tengo claro es que a los animales ( si yo no lo fuera) les costaría la vida. El posible placer de un paladar no puede estar en una especie de balanza con derechos fundamentales porque lo primero es trivial y lo segundo es de vida o muerte.
Se habla del veganismo como una filosofía de vida. Estas de acuerdo?
– No estoy a favor de que se hable del veganismo como “un estilo de vida”, no en cuento a algo que se asemeje a vestirse de tal modo o hacer ejercicio o ser aficionado a algo. Todas esas cosas sí puede ser“ un estilo de vida”. Renunciar a la violencia contra los más vulnerables no es un “estilo o filosofía de vida” sino un compromiso básico con el principio de no violencia. Hablar de “filosofía de vida” sigue poniendo el foco en nosotros, pero no se trata de nosotros, de “ nuestro camino” o de “ nuestro estilo de vida “ o de nuestra “filosofía de vida”. Se trata de los derechos de los animales o en todo caso de nuestra obligación moral hacia los animales.
Vivís con tu familia? Son veganos?
– Vivo solo. Un miembro de mi familia (sobrino) es vegano, vive en España, se dedica a recorrer el mundo en moto y fue el primer argentino en llegar en invierno a Alaska. Tampoco el tuvo problemas para seguir siendo vegano en su travesía.