Teniendo en cuenta que las camas de internación son 15, que haya 6 pacientes que ya han superado los problemas de salud por los que han sido internados, algunos hace más de 6 meses, la situación es preocupante. Además, información obtenida por Por la 3, da cuenta que en la guardia hay una persona que está hace un año. Los motivos? Gente con familias abandónicas o sin ellas, falta de vivienda y recursos económicos, entre otras causas hacen que estos pacientes se hayan quedado eternizados en el hospital, lo que deja en claro la ineficacia en la gestión que debería ocuparse por medio del Servicio Social de la reubicación de estas personas en otros lugares. «Si esto sigue así van a llenar la sala de médica clínica con pacientes sociales ¿qué pasa con la internación de los pacientes comunes?», se preguntó una vecina que conoce bien la situación.
Una situación preocupante y que atenta contra una adecuada atención médica y las posibilidades concretas de internaciones de pacientes que así lo requieren, debido a la menor disponibilidad de camas por estar ocupadas por personas que ya no deberían estar en el hospital, se ha puesto en evidencia hace varios días y tanto vecinos como trabajadores del hospital así lo acreditan.
Se trata de la ocupación de camas de internación por personas que en algún momento han sido ingresadas al hospital por alguna patología y que luego de intervenciones, tratamientos y mejoras, no han sido dadas de alta y siguen ocupando camas.
«Son personas que no tienen donde ir a vivir o no tienen a nadie que los visite y reclame», le contó a Por la 3 personal de salud. La situación es triste, porque generalmente son personas sin recursos económicos
En una habitación con tres camas, los tres son pacientes sociales. O sea que no tienen un lugar donde vivir. Entonces están en el hospital y uno es de salud mental. «Deambulan, o sea salen a comprar al kiosco. Uno de ellos es un paciente obeso, grande, y con patologías, con antecedentes, factores de riesgo, etc.
«También por una cuestión de que no tiene donde vivir. Es un tema complejo», le confesó una vecina a este medio.
Sobre los por qué estas personas siguen ocupando las escasas camas de internación que tiene el hospital, la fuente consultada respondió: «No deben conseguir el lugar donde mandarlos y demás, pero digo, son pacientes que tienen que ponerse las pilas y ver qué es lo que hacen. Hay uno que entró por una pancreatitis, pero se quedó ahí, no tiene familiares, no tiene medios, y también está ahí y hace ya unos seis meses».
Hay 15 camas en internación de clínica médica, de las cuales 6 están siendo ocupadas por pacientes sociales, nada más. Esos lugares son los que pacientes que están internados en la guardia podrían tener acceso a la sala como corresponde.
«La guardia no es un lugar para que esté un paciente con una internación prolongada por ejemplo por una neumonía o un ACV. Son pacientes que tienen que estar en sala. Además hay un solo baño para todos», detalla.
La realidad es que esta situación debería tener una resolución urgente y que este tipo de pacientes no se eternicen en el hospital en las camas de la sala. «No se ocupan de conseguir un lugar para que este tipo de pacientes estén en un lugar específico, tanto los de salud mental como pacientes sociales. Si esto sigue así van a llenar la sala de médica clínica con pacientes sociales y qué pasa con la internación de los pacientes comunes?», se preguntó una de las vecinas que conoce bien la situación.
En el hospital de Villa Gesell, como en todos los hospitales hay persona de Servicio Social que justamente debe atender y gestionar las soluciones correspondientes, por supuesto con el interés de la Dirección del hospital, que hoy está acéfala después de la renuncia de la Dra. Viviana Bassini, y la autoridad máxima a cargo de la Secretaría de Salud, a cargo del Dr. Miguel Muñoz.