El domingo 25 de Junio se corrió la maratón Internacional de Rosario, con la participación de dos Geselinas. Una de ellas, Cristina Costa, es una docente y preceptora que encontró en el arte de correr una luz en su vida y una motivación y alegría que plasma lo vital del deporte como transformación y esperanza, además de sus aportes saludables a la mente y al físico. «Los límites no existen», le confesó a Por la 3, la vecina que participa de cuanta competencia de running encuentra no solamente en Gesell, sino en diferentes lugares.
Por Mariana Ayala
Cristina Costa, docente y preceptora geselina tiene también una pasión que la vive en zapatillas y es correr. El último domingo, su amor por el runnig la llevó a Rosario para participar en maratón Internacional.
Su alegría y felicidad por haber participado en la maratón contagia y entusiasma. Lo hizo junto a Paula Karina Sánchez, otra vecina de Villa Gesell. En la carrera hubo más del 3000 inscriptos con participantes de Argentina y de países vecinos. Cristina logró el puesto número 50 de damas en general y en su categoría salió en el puesto 14 haciendo un tiempo de 3 hs 49 minutos para cubrir los 42 Km, mientras que Paula realizó los 42 Km en 4 horas 53 minutos. Con Cristina y Paula también viajó a competir Sandro Cáceres de la ciudad vecina de Madariaga quién hizo un tiempo de 3.09 hs.
A partir de esta experiencia deportiva, volvimos a conversar con Cristina, quien nos había dado su testimonio en una competencia en Mar del Plata hace un mes. La docente deportista contó sobre cómo ha influido el deporte en su vida: «Los limites no existen, los invito a que hagan un entrenamiento para que vean los cambios que se producen, tanto en lo físico como en la parte mental, nos cambia la forma pensar la forma de resolver situaciones problemáticas¨
¨Las mujeres a veces pasamos a un segundo plano y es triste¨ respondió cuando le consultamos sobre el rol de la mujer en el deporte, el reconocimiento público y la visibilización de los logros que está captada por los segmentos más jóvenes; teniendo una situación de privilegio el reconocimiento por parte de ¨los hombres¨, quedando pendiente una vez más saldar la cuota de reconocimiento de las mujeres .
La historia de Cristina que como la de muchos corredores de Villa Gesell, que entre sus tres trabajos en tres establecimientos educativos y la vida familiar, organiza sus tiempos para poder llevar a cabo su entrenamiento.
El entrenamiento, como lo relata, la ha salvado de momentos muy difíciles en su vida, y con el correr pone en eje alma, mente y cuerpo no sólo para afrontar los 42 Km si no también afrontar con mayor serenidad y felicidad la carrera de la vida
No queda más que felicitar a estas dos mujeres por sus 42 Km y se valora el el contagiar esta felicidad y decisión de vida.
