En su discurso en el HCD, Barrera dejó claro que Kicillof gobierna Gesell y lo que llega no calma las necesidades de los geselinos

Durante la apertura de la Primera Sesión Ordinaria del Concejo Deliberante de Villa Gesell, el intendente Gustavo Barrera se dirigió a los concejales presentes y a los militantes y funcionarios que asistieron al HCD para leer una lista de obras y acciones ya anunciadas y promocionadas durante el último año y antes también, entre las cuales está por supuesto la «utopía» del hospital municipal que ahora promete que será sub zonal como también pretende que sea el aeropuerto. Subiéndose a sus caballitos de batalla que funcionan siempre, como la Orquesta Municipal, la EMO y emprendimientos privados apoyados por el municipio, dispuso su oratoria en repeticiones de acciones y hasta celebró la llegada de la pick up eléctrica Tita y un próximo Tito que viene en camino. La única promesa fuerte que pudo salir de su boca fue la licitación que se realizará a fines de marzo gracias a fondos del BID, para la ampliación de la planta de tratamiento de efluentes cloacales y se animó a anticipar que con esta obra llegarán las cloacas a las localidades del sur.

Una nueva apertura de las sesiones en el Concejo Deliberante tuvo como discursante principal al intendente Gustavo Barrera, que fiel a su estilo hoja en mano, hizo un relato con los detalles de paquetes de obras y acciones, en su mayoría ya anticipadas y promocionadas hasta el cansancio, bajo el modelo de «funcionario en campaña permanente» que no deja nada por comunicar, ni siquiera lo que no se termina o se deja en pausa.

En sus palabras, hay algo que Barrera dejó más claro que nunca y que impacta entendiendo la cantidad de fondos que Villa Gesell recibe por parte de la gobernación de la Provincia de Buenos Aires mediante diversos programas, y es que lo que Kicillof baja a territorio geselino no termina por subsanar las ya históricas falencias que los habitantes del distrito tienen marcadas en su agenda, como por ejemplo, la gravedad de la atención sanitaria pública.

El discurso, difícil de seguir dados los saltos que Barrera daba yendo y viniendo con los temas y las repeticiones, muestra una realidad paralela que la gestión del intendente profundiza en lo que es su gobierno gastado y falto de confianza.

El punto más emblemático sin dudas es lo que Barrera expuso sobre la obra del hospital ubicada en Avenida Circunvalación y Paseo 109 de la que viene armando relatos de avances desde el 2017, cuando la presentó como una «utopía».

Hoy celebró el «llenado de las bases de una línea de encarenado» y llamó a la losa que prometió que iba a ser municipal y ahora sub zonal como «un proyecto ambicioso». La «utopía» pasó a ser un sueño, ya que expresó: «Cuando podamos concluir esta obra vamos a poder derivar a los pacientes, acá nomás a unas cuadras».

Es casi lo único sobre lo que Barrera se atrevió a decir sobre la salud, y no es poco, teniendo en cuenta el malestar generalizado que los vecinos demuestran diariamente, aunque también volvió a decir que se harán las historias clínicas digitales, otra promesa que ya lleva un año legislativo tachado en el calendario.

«El desarrollo de Villa Gesell es un hecho», lanzó el mandatario, que resaltó, una vez más el asfalto de la Avenida Circunvalación que «conectó los barrios del oeste con el centro, para que no haya geselinos de primera y de segunda», dijo ferviente como si estuviese en un acto partidario.

Quien marca el destino de la ciudad hizo hincapié en la terminación de las casas de los barrios Ex Foecyt y barrios Unicornio 1,3 y 3 gracias a los fondos nacionales y a las 16 casas para policías que se llevan adelante por el impulso de la caja de la Fuerza y la provincia.

Se refirió a un tema candente que desde el vecinalismo se está denunciando hace bastante y tiene que ver con el mal funcionamiento y las irregularidades que tiene la planta de tratamiento de fluidos cloacales. Histriónico, el intendente levantó un diario Crónica para mostrar la publicación de un llamado a licitación que se costeará a través del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por unos 400.000 millones de pesos, que se abrirá el 30 de marzo próximo y tiene una duración de obra de 32 meses. «Ojalá haya oferentes», se atajó el intendente que está acostumbrado a compras directas y ausencias de oferentes en sus llamados a licitación.

Volvió a anunciar como lo hizo en la apertura legislativa del año pasado, el programa de Lotes con Servicios en Mar Azul, un modelo para repetir lo que se hizo en Gesell, con la diferencia de que en Mar Azul el único servicio que hay es la electricidad.

Orgulloso de su cercana y adictiva relación con la Provincia de Buenos Aires, recordó que se está haciendo la obra de la Casa de la Provincia sobre Boulevard y Paseo 139, una obra que no solo está muy visible dado su tamaño y ubicación, sino que también generó controversias en su momento por el lugar elegido para construirla, un espacio verde que muchos vecinos lamentaron. En ese sentido confesó que un plan posible es que el municipio se traslade a esa zona también.

En medio de lustrar los carteles de obra sostenidos por la Provincia, el intendente metió bocados de color como por ejemplo una intervención artística que se hará en el tanque de agua de la ciudad, y que será una figura iluminada del fundador de la ciudad, Don Carlos Gesell, como la que el edificio porteño de Desarrollo Social tiene inmortalizada la figura de Evita.

Barrera felicitó especialmente a sus funcionarios de Seguridad Mauricio Andersen y Carolina Runco, impulsó un aplauso para esa área y volvió a recostarse sobre el dato «compramos 100 cámaras», sobre las cuales no se ha dado reporte de ubicación del total. Para engrosar las adquisiciones volvió a recordar la compra de los autos Kronos, que muchos de ellos no salen a la calle por falta de conductores y resaltó los diez móviles policiales que el ministerio de Seguridad provincial dejó este verano en Gesell.

Hablando de rodados, el intendente no pudo dejar de mencionar al auto eléctrico Tito como una importante incorporación y anunció que llegó la pick up Tita y que hay otro Tito en camino. En ese momento felicitó a su funcionaria del área de prensa Paloma Rodríguez, que con sus ilustraciones le ha dado vida y personalidad a estos autos eléctricos adquiridos por la municipalidad a través del programa Municipios de Pie.

A Cultura y a Desarrollo de la Comunidad también le hizo algunos reconocimientos y se guardó momentos para echarle en cara a los concejales de la oposición que no acompañaron algunos de sus proyectos y los de sus concejales.

La Fundación Mar de las Pampas en Concierto, la orquesta municipal y la Emo fueron valoradas por el mandatario y son algunos de sus caballitos de batalla para levantar en alto lo que funciona en la gestión cultural geselina.

Barrera siempre se las ingenia para exponer políticamente a los referentes políticos de Juntos y lanzó que en la Ciudad de Buenos Aires, lo único que hacen «es romper y hacer veredas», paradójicamente algo que vecinos y dirigentes opositores geselinos le reclaman a él. El ataque al gobierno porteño fue en defensa de lo que significa para el gobierno nacional y provincial la causa judicial por la pelea en la coparticipación.

Sobre la educación habló poco y nada, anunció que se viene un profesorado de música e hizo alarde de algunas obras en las escuelas. Prometió que la Primaria 5 de Mar Azul tendrá su playón, seguramente al estilo del playón deportivo que se realizó en la manzana de la Casa de la Cultura, un espacio que se proyectó como polideportivo y solo llegó a ser una base de cemento descolorida.

El tiempo o las estrategias políticas no le dieron cabida en el relato de Barrera a temas que preocupan a la comunidad y centralizan los reclamos y son el transporte público, las desatenciones en el hospital, las carencias en centros de salud, la escases de políticas en salud mental, las problemáticas ambientales, entre otras.

Como cifra rutilante, aseguró que en esta temporada hubo un 20% más de turistas que la del año pasado y aseguró que «somos una ciudad que demuestra gestión y busca siempre la mejor estrategia».