Después de cinco días luego del lamentable suceso ocurrido en horas de la mañana del 31 de diciembre donde Víctor Guevara viajaba parado en un tractor que lleva un carro con basura levantada en la playa y cayó en el asfalto siendo pisado por el mismo vehículo, hoy se conoció la triste noticia de su fallecimiento. Estuvo la primera jornada en el hospital municipal y esa noche fue derivado a una clínica de Mar del Plata, donde fue operado y permanecía en grave estado. Durante estos días la municipalidad se encargó de mantener en silencio absoluto cualquier tipo de información sobre su estado de salud.
El pronóstico de salud de Victor Guevara, Papu como lo llamaban sus amigos y compañeros, fue malo desde el comienzo, cuando fue llevado al hospital de Villa Gesell momentos después de caerse del tractor en el que iba parado sobre un estribo que se rompió y cayó al asfalto de Boulevard entre Paseo 112 y 113, donde fue pisado por el mismo vehículo.
Esa mañana del 31 de diciembre el tractor circulaba con el carro repleto de bolsas de basura y el joven trabajador de 22 años iba «colgado», como contaron personas que lo vieron pasar y presenciaron el accidente.
Guevara, una vez en el hospital, fue tenido en observación a la espera de la atención de un neurocirujano y la gestión de un traslado a Mar del Plata que demoró y no se sabe cuanto exactamente ya que desde el primer momento, los funcionarios municipales cancelaron cualquier tipo de información sobre el accidente y el posterior estado de salud.
Su familia, en el hospital, no quiso dar declaraciones, salvo llegó a pronunciar que fue recibido en la guardia por el Dr. Vazquez. Este medio, al acercarse al hospital ese mediodía pudo corroborar que el intendente Gustavo Barrera se encontraba en su interior para asegurarse de la gestión del traslado que el muchacho requería urgentemente.
Si bien se supo después que tenía un gran daño en la cabeza y fue operado por ello, nunca se dio a conocer el diagnóstico del trabajador y este medio por fuentes extraoficiales pudo corroborar que era muy reservado el pronóstico.
Es lamentable que un hecho así, totalmente evitable, haya terminado con la muerte de un joven y también ver todos los días, que ni semejante suceso sirvió para que los trabajadores dejen de trasladarse en camiones y camionetas municipales en las cajas y bateas, corriendo riesgos similares al de Guevara.
Los funcionarios que dirigen las labores de este tipo como las que realizaba Guevara son Stella Servin, directora de Higiene Urbana, Ana Carolina Chinni, directora de Corralón y Marcos Komac, director de Servicios Públicos.