El concejal Amadeo Montenegro de Juntos, analizó el estado de situación del sistema de salud de Villa Gesell y los últimos hechos relacionados a la obra del hospital, la demolición del caps norte y el pausado proyecto de carrera profesional sanitaria que un año más quedó sin tratarse en el Concejo Deliberante. «Si no hay un cambio en la política, me parece que todos los empujones que podamos dar no sirven», aseveró el edil radical. Hizo memoria y resaltó que las decisión de afectar ese espacio público verde se originó mucho antes de la tala de los eucaliptus que causó una semana atrás la detención de dos vecinas que quisieron evitarla, y la tomó Gustavo Barrera cuando era presidente del HCD en el gobierno de Jorge Rodríguez Erneta.
El concejal de Juntos, Amadeo Montenegro, desarrolló en una entrevista con Por la 3 uno de los temas centrales que desvelan a la comunidad geselina, que es todo lo referido a lo que hace varios años que la salud pública en si misma una problemática en franca decadencia.
Sobre la obra de lo que se prometió como un futuro hospital y la demolición del Caps Norte que está pegado a la losa en Avenida Circunvalación y Paseo109, el concejal aseguró: «La verdad que lo que está pasando con la demolición del Centro de Salud Norte, y la construcción del nuevo Hospital, es la crónica de un final anunciado».
Con respecto a los orígenes del Centro de Salud, Montenegro hizo un poco de historia para demostrar que todo lo que viene ocurriendo en ese predio y las promesas incumplidas tienen a Gustavo Barrera como un gran decisor de objetivos incumplidos y planes cambiados.
«Nuestro bloque viene planteando desde que se sancionó la primera ordenanza, que curiosamente tiene la firma del intendente actual, Gustavo Barrera, en ese entonces presidente del Concejo Deliberante , y Gustavo Barrera fue el que le puso la firma a la ordenanza que eliminó eso como plaza pública y refuncionalizó la parcela, para construir un hospital materno infantil», recordó el concejal.
Montenegro contó que «hubo algún intento por parte del concejales del oficialismo de despegar a Barrera de la construcción del materno infantil y echarle la culpa a Erneta, pero lo cierto es que el primer trámite administrativo que se hace con el materno tiene la firma de Gustavo Barrera que era el presidente del Concejo Deliberante».
Sobre ese momento, Montenegro explicó: «Nuestro bloque planteaba de que había terrenos al oeste suficientes como para poder construir y desarrollar una infraestructura edilicia hospitalaria con futuro, con más amplitud que es esa misma manzana, sin árboles».
El radical aseguró que desde ese entonces en esas manzanas se han derribado más de 20 árboles. «Cuando hay una razón de bien común podría ser justificable, pero creo que nos olvidamos de nuestra historia», confesó. Y agregó: «Son árboles realmente muy añosos y que tienen un valor para los propios vecinos totalmente importante, así que por un lado el capricho de construir en plazas no es el único ejemplo también pasó en Monte Rincón cuando se construyó el Caps oeste en la plaza».
Los ejemplos son recientes, y el ex vicepresidente de la UCR Gesell los enumera: «En Monte Rincón pasó exactamente lo mismo, derribaron pinos realmente muy añosos para construir el centro de salud en la plaza, cuando a 100 metros de ahí hay un loteo, se están vendiendo lotes y ese loteo debe ceder por ley un espacio público, entonces así a 100 metros de la plaza de Monte Rincón, se podía hacer el Caps que plantaron en la plaza tirando árboles. Pasó lo mismo en el Paseo139 en donde para hacer la Casa de la Provincia también se derribaron árboles y también se está construyendo una plaza, es decir, hay como una especie de fetiche con la construcción en las plazas».
Montenegro consideró que «hay como una medida desmesurada y por otro lado más allá de lo ambiental, también está la cuestión del despilfarro de dinero que significa construir los centros de salud que en este caso no llegó a cumplir 10 años, que lo tiramos abajo. Ahí funcionó el vacunatorio funcionaba el caps norte, tirarlo abajo para plantar otra losa es casi una paradoja de esta cuestión que hay como una especie de doble vuelta con la obra la obra pública, aparece un solo oferente, hay como un negocio con la obra pública»
En este sentido, Montenegro apunta al gasto público y advierte: «Lo cierto es que todo eso se está haciendo con dinero de los contribuyentes, entonces cuando vemos cómo se gasta la plata cuando vemos estos idas y vueltas después no se nos explicamos un poquito el porqué de los aumentos y porque este salto descomunal, sobre todo en un año preelectoral, un salto descomunal del presupuesto, ya que es la primera vez en los últimos 20 años que el presupuesto sube más del 100 % de un año a otro, uno compara año a año los presupuestos que han ido pegando un saltito del 20% del 30, en algún caso muy excepcional, hubo un 50 %. Lo que a nosotros nos parece es que no es momento de pegar el salto que se pega del 114 %, pero además ese salto, trasladarlo en gran medida, a los contribuyentes».
Y las deficiencias en el sistema de salud persisten más allá de la designación de un aumento del presupuesto en Salud. Por eso, Montenegro fue categórico y expresó: «El sistema de salud de Villa Gesell, está condenado a que solamente se va a poder cumplir con un cambio de la política, porque el problema central del sistema de salud es la política y si no hay un cambio en la política, me parece que todos los empujones que podamos dar no sirven».
«Salud se lleva el 23 o 25% del presupuesto que es mucho y no funciona, entonces el problema lo tenemos en la política», lanzó.